Ohhh domingo de sorpresas. Que me gustan los
mercadillos tanto como un Dior o un Yves, ya me conocéis o empezáis.
La infractora de todo es Madame Magoo,
ella es una incondicional de ellos,
tiene todo el tiempo del mundo para buscar, indagar y examinar entre montañas de ropa, burros y cualquier
punto o lugar.
Cada segundo domingo de mes tenemos el
Flea, un mercadillo con magia, jovial y donde puedes descubrir cosas
asombrosas, inusitadas e inesperadas.
Esta semana os cuento una historia de amor
Vintange
Una servidora jura y perjura que solo fue
a pasear, como mucho a localizar prendas para algunas clientas, pero sin opción
a compra. Lo Juro por Yves & Dior.
Llevaba media hora mirando las paradas con Madame Magoo,” mira que abrigo; ¿qué te parece esta camisa?”. Cuando percibí una sensación de desconcierto, ya sabéis esa sensación, comencé a recorrer un cuadrante y otro; al principio no veía el objeto, seguí a lo mío.
Pero de golpe empecé a escuchar un
susurro...
“Aquí mira Aquí Si Aquí”.
Si amigas, empecé a verlo.
uhhhhhh no.... no puede ser ese color¡¡¡¡¡.
Mi perdición llego en un segundo, no puedo
ser fiel, tengo una adicción impresionante, si lo reconozco es superior a mí.
Os presento a mi nuevo amor, no pude resistirme.
Ya lo se¡¡¡¡¡¡¡ tengo 2 armarios llenos, mi consorte me ha dado un ultimatum, ellos o yo, ¿Sabéis quien esta haciendo las maletas?. ¿quien se va?....
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